Vivienda de lujo, ¿qué características deben recoger para contar con este calificativo?
Decía el gran Groucho Marx que “la felicidad está hecha de pequeñas cosas: un pequeño yate, una pequeña mansión, una pequeña fortuna…”. Fuera de bromas, no todas las casas con 15 habitaciones y miles de m2 de parcela o con un precio desorbitado pueden considerarse de lujo.
La vivienda de lujo puede definirse como aquella que satisface todas las necesidades del comprador. “Obviamente, a partir de un determinado nivel de vida, esas necesidades pueden ser parecidas, pero no tienen por qué coincidir”, expone. Es más, el lujo no es lo mismo para todos, pero sí sentimos el lujo cuando la vivienda cubre todas las necesidades que cada uno tiene.
El lujo no va únicamente ligado al precio, sino a qué cosas hacen únicas esa propiedad respecto a la gran mayoría del parque de viviendas en una misma zona.
Una vivienda de lujo se caracteriza por factores que la hacen especial; una gran ubicación, unas buenas vistas, luz, un mobiliario de diseño, elementos artísticos y arquitectónicos, seguridad, elementos de confort como piscina o jardín.
El concepto del lujo ha pasado de ser algo considerado excesivamente caro y exclusivo para millonarios a ser una expectativa más tangible“. “Lujos que antes nos parecían inaccesibles ahora los vemos como algo normalizado: urbanizaciones con gimnasio, jacuzzi, etc.”, aclara.
Por este motivo, el directivo de Engel & Völkers considera que la ostentación ha dado paso a una arquitectura de líneas minimalistas. “El auténtico lujo en el sector inmobiliario podríamos definirlo como aquellas viviendas de calidad y buenos materiales que conforman un verdadero hogar para el propietario”, afirma.
Por su parte, Nacho García-Milla, fundador de Cicerone Real Estate, defiende que el término “vivienda de lujo” se ha extendido tanto en los últimos años, que su significado ha llegado a perder su esencia original y exclusiva, para dar paso a conceptos en los que extravagancia y lo excesivo muchas veces se hacen con todo el protagonismo.
Esta desviación ha llevado a Nacho García-Milla a desarrollar un breve vademécum con los requisitos imprescindibles que debe poseer una vivienda para ser considerada exclusiva o de alta gama.
Una ubicación privilegiada
Lo primero que debe cumplir una vivienda de lujo es tener una ubicación privilegiada, según el fundador de Cicerone Real Estate. Para algunos puede ser en medio de la ciudad y para otros, en un paraje remoto en medio.
“La ubicación es esencial, porque, aunque se haga una gran inversión en la reforma de un inmueble con materiales de primera calidad, si no está ubicada en un barrio considerado de lujo, nunca será considerada una vivienda de alta gama”, afirma García-Milla.
Para el consejero delegado de Engel & Völkers España, la ubicación es el factor más importante que define una vivienda de lujo. “Este tipo de propiedades se encuentran en las zonas más prémium tanto del centro de las ciudades como en las urbanizaciones más exclusivas que cuentan con seguridad las 24 horas”, ahonda.
Materiales de fabricación de alta calidad
Otro de los aspectos más relevantes son los acabados del inmueble. El empleo de maderas nobles, mármoles de importación, sanitarios y cocinas de diseño, electrodomésticos de gama alta y tecnología para hacer la vivienda confortable y equipada con todos los servicios. Lo que caracteriza el lujo es el esmero con que se han combinado los materiales para lograr un ambiente original, acogedor, sobrio e impactante.
“Una propiedad de lujo debe estar construida con materiales y acabados de alta calidad para hacer de la vivienda una residencia única, confortable y equipada con todos los servicios.
En este sentido, los gustos varían según el tipo de comprador, pues no buscan lo mismo los clientes rusos o chinos que los centroeuropeos o americanos. “Está muy relacionado con la cultura del comprador.
Privacidad
Es una de las características más reclamadas por los compradores. Una casa en una zona residencial, rodeada de otras viviendas, debe cumplir unas características que proporcionen privacidad a los propietarios respecto de sus vecinos.
Si se trata de un piso de alta gama ubicado en plena ciudad, también debe cumplir este requisito, teniendo, por ejemplo, un acceso independiente a la vivienda del resto de inquilinos en el edificio.
Los servicios disponibles
Tanto si se trata de una casa como si hablamos de un piso, ambos deben tener características exclusivas en cuanto a servicios. En el caso de los pisos, la portería durante las 24 horas es un imprescindible. Otros servicios adicionales suelen ser un gimnasio privado, piscina y amplias zonas comunes. En el caso de las viviendas en barrios residenciales deben contar con que representen un valor añadido para la comunidad de vecinos.
En EEUU, hay muchos barrios residenciales y pisos de lujo, en los que para poder entrar a vivir debes ser admitido por la comunidad de vecinos.
La distribución interior
El tamaño no importa cuando se habla de lujo. Aunque se suele asociar con palacios y viviendas de miles de metros cuadrados, lo cierto es que también existen inmuebles de alta gama pequeños.
Para la inmobiliaria, la vivienda tiene que estar bien distribuida, con estancias amplias y proporcionadas. Cada dormitorio debe estar equipado con su baño independiente y, en el caso de la habitación principal, se distribuye en el mismo espacio un vestidor y un baño en suite. Además, como normalmente sus propietarios tienen personal de servicio, también necesitan de habitación con office.
El precio marca la calidad
Un millón de euros es la barrera psicológica que marca el precio de partida para una vivienda de lujo. Más que el precio de la vivienda, hay que valorar el precio del metro cuadrado, que suele variar en función de la ubicación del inmueble. En este sentido, en ciudades como Madrid o Barcelona el precio del metro es superior que en el resto de ciudades españolas.
En el caso del superlujo, hay que empezar a hablar a partir de cinco millones de euros. Puede hacerse una idea en la lista de las casas más caras de España publicada en Invertia.
En la valoración del lujo la calidad de la vivienda influye más que el precio.
(Fuente: elespanol.com/invertia)